Con cloro o hule cristal: así se protegen del Covid-19 los choferes de transporte público

MÉXICO.- Hace un año, autoridades del gobierno hicieron un llamado a la ciudadanía a quedarse en casa, para evitar que el coronavirus se propagara en el país. Esto provocó que muchas actividades no esenciales se realizaran en el hogar, mientras otras, como el transporte público eran necesarias para transportar a una parte de la población.

Sin embargo, muchos mexicanos seguían sin creer en el coronavirus y salían a las calles sin las medidas sanitarias, lo que provocó que muchos conductores del transporte público se contagiaran y gran parte muriera.

“Fue un problema muy complejo porque como en muchos lugares, alguna gente no creía en la situación fuese real, mucha gente la interpretó como otro tipo de cuestiones, incluso políticas, también teníamos compañeros en la misma situación”, señaló en entrevista Nicolás Galván, transportista de la Ciudad de México.

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Esto provocó que se utilizaran medidas para su propia salud, desde cubetas con cloro para limpiar el dinero en los microbuses y poder llegar a su domicilio en la situación de llevar de la manera menos posible el contagio.

“Hoy la mayoría de los microbuses se limpian con agua y con cloro cada ocasión que llegan a las bases terminales, tuvieron que hacer esta situación de limpieza porque la realidad es que si se vio que hubo un número de infectados bastante alto en toda la ciudad.

Algunos otros tratando de ser cautos, "ponían una cubeta con agua y cloro, el dinero que les daban en cambio lo echaban ahí y llegando a la base sacaban el dinero".

Para los taxistas tampoco fue la excepción debido a que las autoridades capitalinas solicitaron a los choferes protección para su transporte, lo que de alguna manera también significó parte de un impacto monetario ante las pérdidas de ingresos.

“La autoridad ha solicitado ciertas medidas de protección y precaución, debido al coronavirus, como el uso de hule cristal entre la parte delantera y trasera del taxi para disminuir posibilidades de contagio, el uso de geles, jornadas de desinfección de las unidades”, dijo Ignacio Rodríguez.

Los gastos para dichas disposiciones van desde los mil 200 pesos a mil 400 pesos en promedio del acrílico, 50 pesos cada 5 días para el gel antibacterial y 2 mil 770 pesos para el galón de 20 litros de desinfectante de unidades.

Golpe fuerte a su economía

Para el transporte concesionado, la pandemia ha sido bastante fuerte para su economía, en la entrada del semáforo epidemiológico rojo pegó al 80 por ciento prácticamente de sus ingresos. Hasta la fecha, las actividades se han ido programando poco a poco, aunque sostuvieron que aún hay afectaciones del 65 o 70 por ciento.

“Estamos hablando que nuestros ingresos aún andan por abajo más o menos del 50 por ciento, mínimamente, es un poco más, pero siendo muy conservadores del 50 por ciento de nuestros ingresos son los que se han perdido”, manifestó Nicolás Galván.

Por otra parte, 140 mil concesionarios legales del taxi han mantenido un ingreso bajo, pues durante los primeros meses de la pandemia, en el caso de aeropuertos, terminales, centros comerciales perdieron el 90 por ciento de sus clientes.

Actualmente no han tenido una recuperación total debido al home office, sumado a que los estudiantes no han reanudado clases presenciales.

“Se puede reflejar a que hoy en día el sector no ha podido cubrir conceptos de obligaciones fiscales como pagos de tenencia, pagos de revistas, pagos de los cajones, porque los taxis que damos servicio en sitios y bases, tenemos que pagar derecho para estacionarnos en la vía pública que nosotros le llamamos el pago de cajones”, mencionó Ignacio Rodríguez, del Movimiento Nacional Taxista.

Conductores enfermos y muertos por covid

En la Ciudad de México, hay un promedio de 18 mil transportistas concesionados, al no contar con actividad físico motora, la mayoría de ellos cuentan con encontramos enfermedades como diabetes, hipertensión arterial y obesidad, lo que provocó que varios de ellos se infectaran de covid-19 y murieran.

En cuanto a los taxistas, observaron que en terminales de autobuses es donde más defunciones se han registrado en choferes.

mvls