Compradores recienten aumento de precios a productos básicos

MONTERREY.- Si usted acudió recientemente a realizar el super y se percató que le salió más caro de lo acostumbrado, preste atención porque a partir del 2020 muchos productos de primera necesidad, como el pan, la leche, galletas y otros alimentos… subieron de precio.

Esto obedece a la actualización del (Impuesto Especial sobre Producción y Servicios), mejor conocido como IEPS.

De acuerdo con la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) el incremento del salario mínimo para el 2020 de poco servirá para el consumo, ante dichas alzas en los productos que representan un fuerte golpe en la economía de las familias.

“En general hay una escalada de precios que convierte a la cuesta de enero más en una pendiente y desde luego, el efecto que pudo haber tenido el 20 por ciento de incremento al salario mínimo que se otorgó desde el primero de enero es un efecto difuso o se pulveriza”, mencionó el presidente de la ANPEC, Cuauhtémoc Rivera. 

Aunque es una medida aplicada a nivel nacional, en Nuevo León, muchas familias ya se percataron que gastan más en sus compras básicas.

"Es difícil porque ya no podemos llevar la despensa que llevábamos antes, ahora tenemos que adaptarnos a otra forma, llevar un poco menos o escoger muy bien los productos que compramos”, dijo María de los Ángeles.

Impuesto Especial sobre Producción y Servicios:

-Refrescos o bebidas azucaradas : $1 presentaciones pequeñas y $3 botella grande.

-Pan de barra o de caja: $2 pesos de incremento.

-Pan de dulce: entre $2 y $3 pesos.

-Lácteos: entre $1 y $2 pesos de aumento.

-Bebidas energizantes.

-Bebidas alcohólicas.

-Cigarros: $6.

-Gasolinas y diésel.

"Aumentan los artículos o productos de primera necesidad como los alimentos, pero los salarios siguen igual, esto claro que afecta la economía de las familias”, señaló otro comprador, Roberto de la Cruz.  

De acuerdo con el Centro de Análisis Multidisciplinario de la Facultad de Economía de la UNAM, en 30 años la población mexicana ha perdido hasta un 80  por ciento su poder de compra.  

En 1987 un ciudadano debía trabajar 4.9 horas para comprar la canasta básica, pero en 2017 a la fecha, se requieren en promedio 24 horas para comprar los mismo productos.

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