San Juan de Dios se prepara para reabrir

El Mercado San Juan de Dios, ubicado en el corazón de la Perla Tapatía, se prepara para reabrir sus puertas a las personas, luego de semanas de no poder operar debido a la pandemia de covid-19. Desde temprana hora, este lunes comerciantes del lugar limpiaron los techos de los locales, además de lavar las paredes y pintar las bardas ya desgastadas. 

De momento, los pasillos del mercado más grande de Latinoamérica siguen luciendo vacíos, y las cortinas de los locales del primer y tercer piso cerradas, donde se encuentran los comercios de productos no esenciales, como ropa, calzado y electrónicos. 

De acuerdo con los dueños de los puestos de comida del piso dos, se buscará llegar a un acuerdo con el Gobierno de Guadalajara y de Jalisco para la reintegración no sólo de los negocios del mercado sino también de los alrededores. 

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"El ayuntamiento y el gobierno del Estado va a hacer un análisis primero de los comercios pero no todo se va a abrir", indicó José Luis Gutiérrez Armas. 

"Ya queremos abrir, en Obregón está propuesto que si hoy no hay un arreglo, el miércoles hay una gran marcha, Obregón, Medrano, parte del centro de Tonalá. Ya basta de esto, ya queremos abrir, hay mucha necesidad", añadió.

Para José Luis, quien ha trabajado en el mercado desde hace 64 años, ver apagado el lugar y escuchar la preocupación de sus compañeros impacta emocionalmente en su estado de ánimo. Además, a pesar de ser un negocio esencial, José Luis no ha logrado sacar los gastos del día.

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"Ver a los compañeros que económicamente van mal, sí lastima a uno, si un compañero no tiene, nos damos la mano pero sí está muy lastimado el país. Yo digo que ya basta de esto, ya van 60 días, no fue cuarentena", lamentó.

De acuerdo con los locatarios, las autoridades municipales y estatales no han tenido acercamiento con ellos para informarles sobre el proceso de reactivación.

Ellos quieren volver a ver con vida los pasillos del mercado, pues muchos han pasado más de 60 años laborando en su interior y con convicción quieren entregar lo que falta de vida en el emblemático Mercado San Juan de Dios. 

CGE