Vendedores de ramos del templo de la Merced no registraron aumento en sus ventas

El Domingo de Ramos es una celebración cristiana que se conmemora el último domingo antes de Pascua y marca el inicio de los días santos. En esta tradición se acostumbra que los fieles acudan al templo para bendecir sus palmas.

Este año los vendedores que se instalaron a las afueras del templo de la Merced no incrementaron sus ventas. Hubo quien tuvo que disminuir el costo de su mercancía.

Aunque Jalisco se encuentra en semáforo verde, los comerciantes aún siguen enfrentando las consecuencias que ha traído la pandemia.

A pesar de que si se conmemoró la celebración religiosa, el aforo de personas se redujo a la mitad por lo que fue imposible que alcanzaran el número de ventas comparado con años anteriores.

Mario Rodríguez decidió seguir con esta tradición heredada por sus abuelos. Refirió que este año el precio de cada una de las palmas que él elabora tuvo un costo de 40 pesos para el público y aún así no le ganaron mucho.

Agregó que tuvieron que invertir poco más de 1,500 pesos y el costo del permiso por los tres días que se instalaron.

Lo que le preocupa es que no podrá recuperar lo que invirtió ya que únicamente pudieron comercializar su producto de jueves a domingo y lo más probable es que terminen tirando las palmas.

Esperan que para el próximo año la situación mejore.