Los ejidos San Lorenzo y El Oasis esconden tres riquezas naturales

Los ejidos San Lorenzo y el Oasis, localizados en los límites de los municipios de San Pedro y Francisco I. Madero, comparten un atractivo natural que a la fecha muy pocos conocen.

Son tres cuevas, "El mezquite", "El guano" y "Argentina", tres fallas que desde hace décadas, están ocultan entre una zona cerrada que divide ambas comunidades, su acceso no es nada fácil, es don Rafael Silva Carrillo, quien en su infancia trabajo en una de ellas, sustraían estiércol de murciélago, el cuál era utilizado como fertilizante.

Este hombre, narra cómo logró estar dentro de un espacio denominado "El salón", un lugar en el que había que llegar con equipo especial, donde el suelo era fangoso y por su humedad llegó a localizar restos de antiguas civilizaciones e incluso cráneos humanos.

La llegada al lugar no fue nada fácil, tras una caminata de 30 minutos y a una altura aproximada de los 500 metros sobre el nivel se suelo regular de la tierra, fue posible localizar la segunda de las cuevas, la denominada "El mezquite".

Una roca enorme inclinada a 70 grados hacia el poniente, es el techo de esta gran bóveda, el suelo es irregular y está compuesto por rocas grandes y pequeñas, además de arena como si poco a poco fueran succionadas al interior que tiene una profundidad mayor a los 50 metros hasta donde fue posible ver. Este lugar incluso para Don Rafael era desconocido hasta este martes que decidió acompañarnos.

En su interior, es posible ver poca flora, de igual manera como existen huellas de serpientes que a su arrastrar marcan la arena, esto por ser lugares apropiados lejanos del sol y del hombre, son las tres cuevas de San Lorenzo, una riqueza natural de la Comarca Lagunera que pocos han visitado, pero quienes lo logran disfrutan de un paisaje único.