Los resultados preliminares se basan en datos obtenidos de más de 35 mil mujeres estadounidenses que recibieron la vacuna de Moderna o Pfizer mientras estaban embarazadas.
Cada color de jalea representa una vacuna contra el COVID-19 diferente: amarillo cítrico para AstraZeneca, un amarillo ligeramente más oscuro para Sinopharm, verde matcha para Pfizer, anaranjado para la Sputnik V y un azul vivo para Moderna.
José Luis Alomía, director general de Epidemiología, no descartó que, si en su momento empieza a haber disponibilidad y posibilidad de adquisición de la vacuna Moderna, sea adquirida para su aplicación en nuestro país.
“Hay que adelantarse al virus”, dijo la doctora Nadine Rouphael, de la Universidad de Emory, que está ayudando a conducir el estudio de la nueva versión de la vacuna de Moderna.
Los datos disponibles muestran que las vacunas chinas van a la zaga de otras como Pfizer y Moderna en términos de eficacia, pero requieren controles de temperatura menos estrictos durante el almacenamiento.
Varios incidentes de reacciones alérgicas, incluidos episodios graves conocidos como anafilaxia, se han reportado en Estados Unidos después de la administración de las vacunas de Pfizer/BioNTech y Moderna.