Ankara ha acusado a las fuerzas kurdas sirias a las que combate en el nordeste de Siria de liberar el mes pasado a familias del grupo extremista de sus campos de detención.
El presidente de EU dijo que "una gran cantidad" de partidarios del líder, Al Bagdadi, murieron en la operación y agradeció el apoyo de "Rusia, Turquía, Siria e Irak".
Encabezados por el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, la comisión intervino en Turquía para solicitar que las tropas detengan el ataque contra los kurdos.
Trump dijo que los aproximadamente mil soldados estadounidenses que habían luchado contra el EI en el norte de Siria al lado de los combatientes kurdos abandonarán el país.
Las dos naciones se sumaron al grupo de naciones como Holanda, Finlandia y Noruega, que ya había realizado anuncios similares tras manifestar su oposición a la campaña militar turca.