El Gabinete ha estado bajo presión, luego que más de 160 personas murieran y más de 6 mil resultaran heridas el pasado 4 de agosto tras una potente explosión de una carga peligrosa almacenada en el puerto capitalino.
Mientras que el gobierno realiza la investigación para conocer las causas de la explosión que ha dejado 157 muertos; decenas de libaneses volvieron a salir a las calles en protesta contra las autoridades.