Las temperaturas récord de esta semana son una emergencia climática, indican científicos y expertos de salud, en la que el calor es responsable de más muertes en Estados Unidos.
Ante estos cambios drásticos de temperatura, los pobladores solo esperan que las lluvias puedan llegar y mitigar la ola de calor que impacta la región.
Los operadores de electricidad en el estado pidieron a la población limitar el uso de lavadores y aires acondicionados por la ola de calor que ha dejado temperaturas de hasta 40 grados.