La odontóloga le reclamó al presidente muncipal que no le pagó 300 tamales que preparó para un evento, además de que la despidió de su trabajo en el Ayuntamiento.
La mujer tomó la palabra durante un evento al que también acudió el gobernador Rutilio Escandón; le pidió también que le regresen su trabajo del que fue destituida recientemente.
"Es una tradición cada mundial, cada cuatro años, nos organizamos y hacemos una pequeña comida, este año fueron tacos, la otra vez fueron tamales", dijo uno de los empleados.