La celebración le da seguimiento a la rosca de reyes del 6 de enero, quien se encuentre el muñeco dentro de esta, deberá traer los tamales para este día.
Uno de los vendedores, Christopher Méndez quien junto a su familia ofertan vestidos y sillitas para el niño Dios, explicó que los efectos de la pandemia les han afectado en cuanto a las ventas registradas los últimos dos años.
Vestir al Niño Dios el 2 de febrero para el Día de la Candelaria es una tradición que todavía permanece arraigada en algunos hogares católicos de México.