Warren East intentó tranquilizar a los inversionistas en su reunión anual de que se logró contener los costos de los problemas de larga duración en el plan de motores que impulsa el avión comercial 787 Dreamliner de Boeing.
El presidente de Estados Unidos dijo que si estuviera a cargo arreglaría el avión, agregaría algunas funciones adicionales, y le daría un nuevo nombre.
El escrito presentado en un tribunal federal en Illinois, busca proteger a todos los accionistas de la compañía que compraron títulos de la aerolínea entre el 8 de enero y el 21 de marzo.
Las entregas del avión más vendido de Boeing se congelaron luego de que los vuelos del modelo de fuselaje estrecho fueron suspendidos tras el desplome de una aeronave de Ethiopian Airlines.
El diario estadunidense reveló que los pilotos apagaron el sistema de control de vuelo automatizado, posible factor del accidente, pero no pudieron recuperar el control del avión.