Con sabor a gloria

FUE UN TRIUNFO ANTE SU HERMANO EL ATLAS.- Fueron muchas jornadas en las cuales el Santos Laguna solamente sufría derrotas y solamente un empate había logrado, por lo que en el actual torneo del futbol mexicano, solamente un punto llevaba y al conjunto lagunero le hacía falta una victoria. 

El equipo Albiverde había mostrado una leve mejoría, pero tenía que llegar el momento en conseguir su primera victoria, la cual fue frente a su hermano que vive en la ciudad de Guadalajara y es el Atlas. 

El resultado final el domingo en el Territorio Santos Modelo fue de dos goles a cero, tantos anotados por la reciente contratación, el atacante chileno Bruno Barticciotto, quien ya en el anterior encuentro había dado muestras de un buen futbol. 

Ahora frente al conjunto rojinegro marcó un doblete, pero además el Santos Laguna ofreció un buen partido, en donde los defensores encabezados por Santamaría, el mismo Abella, Echeverría y con Güemez en la contención, así como en la delantera por Dájome y Santi Muñoz, sacaron la casta por los locales en el TSM. 

No cabe duda que este triunfo para el Tano Ortiz fue oxígeno puro y por lo que ya puede respirar tranquilo. Sabe el entrenador lagunero que tuvieron que pasar 16 partidos sin ganar y ahora después de este triunfo, además de dejar el sótano con sus cuatro puntos y quedar en el lugar 16, está arriba de Xolos y del San Luis. 

No cabe duda que el refuerzo chileno le cayó como anillo al dedo al Santos Laguna y ahora el entrenador Fernando Ortiz, tendrá que pensar en el futuro de los Guerreros, ya que el torneo mexicano de futbol se encuentra a la mitad y por lo que todavía se vale soñar. 

Hay que reconocer que muchos aficionados le han dado la espalda a los Albiverdes, pero también hay más que sabe que hay que estar con el equipo en las buenas y las malas. A estos hinchas de hueso colorado ya no sabían lo que era disfrutar de un triunfo y los muchachos del llamado equipo de todos, les dio la satisfacción que tanto les hacía falta con ese dos goles a cero. 

Fue un triunfo con todas las de la ley, ya que el once lagunero salió con coraje, con ese deseo de alcanzar la victoria y al cual poco le importó que el rival fuera su propio hermano. Fue un triunfo con sabor a gloria y ahora sigue Rayados del Monterrey.

Walter.juarez@milenio.com